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Cita

Enric Pou
    
Enric Pou:   Primer Escuadron de Cazadores Paracaidistas del E.A.

Publicado 28 diciembre, 2009 por Carlos Teixidó en Ilusión cumplida

IlusiónIlusión Cumplida por Enric Pou i Quert   2 comments

                     

               Curso 47 del EA 1959 al 1960

               Ilusión Cumplida.

               Enric Pou i Quert

               Cazador Paracaidista del 47 EA

.

Empezó todo  allá por  el año 1948, no recuerdo bien  la fecha, ha  llovido  mucho  desde entonces, pero  narraré  los  recuerdos  que todavía tengo vivos en mi mente. Es curioso, como muchas veces los sucesos más cercanos se borran de nuestra mente, y  sin embargo  otros permanecen en ella, y ni el paso de los años ha podido borrar.

 por aquel entonces los niños no disponían de juguetes, al contrario de cómo ocurre en la actualidad, debido a que el dinero escaseaba, el  país recientemente había salido de una guerra civil, y en Europa se había terminado la segunda Guerra Mundial, por lo que faltaba de todo, y los juguetes, al no ser un artículo de primera necesidad, con más motivo, cuando ibas por la calle y veias un niño con un coche o un tren, o una niña con una «pepona», se te caía  la baba, y por esta razón la infancia de entonces se confeccionaba una variedad de juguetes con cualquier artilugio, creo que esto  era bueno porque reforzaba nuestra inventiva Y así pasábamos el rato entretenidos. Por  la ciudad  circulaban pocos  coches y los niños pasábamos muchas horas en la calle jugando a una cantidad de cosas inimaginables, hecho bien conocido por la gente que pasamos de los sesenta.

En aquellas fechas, en el cine se estaba proyectando una película cuyo argumento estaba basado en paracaidistas, por aquel entonces era una novedad, el caso es que a mí me dejó una huella muy profunda, que posiblemente me marcó para toda la vida. Sucedió más o menos de la forma que voy a narrar:

  

Yo pertenecía a  una  familia trabajadora, y en aquellos dias muy pocas familias podian permitirse el lujo de ir de vacaciones, pero en la nuestra había un tío abuelo, que era sacerdote que tenía una casita al pie de la montaña de Montserrat, cada año y en verano pasábamos unos días de vacaciones en aquel  pueblecito. Allí empezó mi aventura

 Al estar sin ningun  amiguito  y sólo con mi hermano, 4 años menor que yo, algo tenía  que hacer para pasar el tiempo, como la casa  estaba  deshabitada  la mayor  parte  del año, allí había muchos trastos viejos. Me dirigí al desván y en una cómoda encontré una gran  sabana vieja que  posiblemente ya no se usaba, al verla tuve la gran oportunidad de mi vida de hacer realidad mi gran sueño, no iba a dejar escapar esa ocasión por nada del mundo, desde que hacia un par de años, había visto aquella película de paracaidistas que saltaban de un avión, mi ilusión era ser yo uno de ellos, ser paracaidista, asi que, ni corto ni perezoso, puse en práctica la idea de  confeccionarme un paracaidas, y así lo hice, tarde toda la mañana, y creo que me quedo bastante bien en cuanto a la estética, porque en la práctica el salto fue un desastre total. Me subí a un segundo  piso , y sin pensármelo  dos veces salté como un paracaidista valiente y entregado. El castañazo fue de órdago,  pues mi constitución no lo era suficiente fuerte, las piernas no aguantaron el golpe y mis posaderas dieron en el suelo, vi estrellitas … suerte que la casa era  antigua y la construcción era muy baja. La  aventura terminó  un poco mal ya que tuve que guardar cama durante seis meses. Me recupere muy bien, pero desde entonces mis padres me controlaron un poquito mas.

 

 Pasaron los años, y al cumplir los dieciocho … vi mi gran oportunidad, convenci a mi familia que esperar a que me llamaran por quinta era una pérdida de tiempo, pues no estaría libre hasta cumplidos los veintiuno o veintidós años, y no subías de categoría  profesional  hasta estar libre   del servicio militar. Por lo que hice la instancia al Ejército del Aire para hacer el servicio militar, lo tramite directamente en Madrid,  decían que alli  te  aceptaban con más rapidez, y as fue,  lo demás ya  vino cantado, ya veréis como pasé las vivencias a partir de mi vida militar, Cazador Paracaidista del Ejército del Aire, que no es poco, para un muchacho de dieciocho años.

Pasaron unos pocos días y por fin llegó la citación para que me presentará en el Ayuntamiento de mi ciudad, Manresa, y allí me entregaron un documento que rezaba siguiente: «A los Paisanos Carlos Teixidó  García y Enric Pou Quert se les concede un pasaporte para que  desde Manresa  se trasladen a Madrid haciendo el viaje por ferrocarril por cuenta del Estado y por lo tanto, ordeno a las autoridades que  de mi  dependan , y  a las que no, no les pongan impedimento alguno en su marcha, facilitándoles los auxilios que al margen se expresan, así cuantos  puedan  contribuir al mejor desempeño del servicio «y firmaba el General Jefe de la Región.

  No podéis imaginaros lo importantes que nos sentiamos, el compañero Carlos Teixidó  y  yo, (que no nos conocíamos todavía), partimos en un tren correo que le llamaban «Shangai», tardamos dieciséis horas hasta la llegada a nuestro destino. Sobre las seis de la mañana del 14 de marzo de 1959 nos apeamos, pues habíamos llegado a la Estación de Atocha. Juntos nos dirigimos a la calle Rodríguez Marín n º 5 (Colonia El Viso), puesto que allí se encontraba el CRM Centro de Reclutamiento y Movilización. Llegamos puntuales a  nuestra cita a las 8.30, con 18 y 20 años cumplidos,  Carlos  era mayor que yo, y allí estábamos, con una gran ilusión que es  muy dificil  de expresar. En Aquellos momentos no podíamos imaginar que allí se   estaba incubando lo que sería el 47 Curso de Paracaidistas del Ejército del Aire.

  Después de dos días, habiendo pasado una revisión médica favorablemente, nos dieron un carnet que acreditaba que pertenecíamos al Ejército del Aire, por la noche ya estábamos en un tren con un destino Alcantarilla. Tardamos muchas horas en llegar, ya que en Chinchilla hicimos transbordo y allí estuvimos esperando unas 5 horas, recuerdo que durante el viaje no nos suministraron nada de comida, éramos jóvenes y el cuerpo lo aguantaba todo. Ya por fin llegamos a  Murcia y nos trasladaron  a la Escuela  Militar de Paracaidismo Méndez Parada,  ubicada en Alcantarilla. Llegamos el día 17, ya las dos horas nos comunicaron que si queríamos quedarnos nos proporcionarían alojamiento y comida hasta el 31 de marzo que era Cuando comenzaba el curso, o bien podíamos volver a casa pero el coste del viaje corría de nuestra cuenta. Junto con mi compañero Carlos y algunos más elegimos esta última opción, nos desplazamos en tren hasta Valencia y allí cogimos otro con destino a Barcelona.

 Pasados estos días, el 31 de marzo ingresamos como alumnos en la escuela de Alcantarilla. A la mañana siguiente, nos distribuyeron por patrullas, compuestas de 10 a 12 alumnos y una vez repartidos nos asignaron los instructores, yo quedé integrado en la del cabo 1 º Francisco Vidal Macanás, que  E.P.D. El responsable de varias patrullas era el teniente Lobato, los dos eran de una gran profesionalidad y como responsables guardo un grato recuerdo referente al trato para con los alumnos. Nos entregaron los uniformes y durante el resto de la semana nos sometieron a una  serie de pruebas físicas,   las cuales son todos los que estuvimos allí ya conocemos.

  El lunes día 6 de abril, empezaron con mucho rigor las clases de educación física, instrucción militar e Instrucción Paracaidista, como salto a la lona, saltos desde la torre, salto atado en un atalaje, saltos continuos desde un muro de un metro de altura para ir fortaleciendo los tobillos y los glúteos.  Es muy posible que muchos  compañeros no se diesen cuenta que además de prepararnos físicamente también lo estaban haciendo en el aspecto psicológico,  nos inculcaban que  por  pertenecer a  un  grupo de élite estábamos por encima de los demás, en aquellos momentos para mí aquella actitud  era incomprensible  , pues algún instructor nos instaba a «poner cara de perro», esto endurecía nuestras facciones  y nuestro espíritu , con dicho sistema nosotros estábamos convencidos que ibamos a ser más respetados por otras tropas del ejército, tambien se nos imponía una disciplina muy férrea como venían haciéndolo en la Legión. Hoy al cabo de cincuenta años comprendo el porqué de aquél sistema, que dio muy buenos resultados, pero que hoy sería del todo obsoleto.

  Durante el curso realizamos los seis saltos de rigor, necesarios para obtener el título de Cazador Paracaidista, lo más destacable  del curso fue que  durante tres semanas nos machacaron haciendo instrucción para desfilar ante el jefe del Estado en el desfile de la victoria que aquel año se realizó en Valencia, nos comentaron que lo habíamos hecho muy bien, creo que  así fue, pues salimos en la portada del periódico de Las Provincias, fue un honor para el 47 curso.

A primeros de agosto se dio el curso  por terminado , nos entregaron el título, un diploma que lo acreditaba , un mes de permiso, y el destino para que nos incorporásemos al Primer Escuadrón de Cazadores Paracaidistas del Ejército del Aire en la base de Alcalá de Henares El 30 de setiembre del 1959.

  Una vez incorporados en el Escuadrón, durante los primeros quince días lo pasamos muy mal. Y fue debido  a  que nuestra llegada coincidió con el curso de 39,  este curso estuvo en la guerra de Ifni-Sahara 1957-58, es posible que ellos en campaña hubiesen vivido algunas experiencias  desagradables,  por lo que se desquitaron con nosotros por el hecho de ser reclutas y poco curtidos . A las dos semanas los licenciaron y nosotros empezamos a respirar, pues los del curso 43 más o menos eran como nosotros, a estos los licenciaron a la llegada del curso 49 a finales de diciembre y nosotros quedamos como veteranos, creo que la convivencia con este curso fue  muy buena .

 

 Al margen del tipo de vida que comportaba estar en paracaidismo, durante aquel año que pasamos en el Primer Escuadrón, realizamos cosas interesantes, dignas de mencionar: Saltos de exhibición en Gijón, Segovia y la Casa de Campo de Madrid, el desfile de la Victoria del año 1960 en Barcelona también con la presencia del jefe del Estado.

El día 23 de diciembre del 1959, el Escuadrón Tuvo el honor de ser la guardia del Presidente de los Estados Unidos, el general Eisenhower, en su visita a España  .Intervenimos en el rodaje de la película «Ahí va otro recluta» protagonizada por José Luis Ozores.

   Cabe destacar que Durante todo este tiempo no nos ocurrió Ningún accidente importante. Si que hubo un incidente que es digno de mención. Fue cuando nuestro compañero Ángel García del Riego,  un día que  teníamos salto quedó enganchado en el avión con la cinta extractora de su paracaídas, estuvo unos quince minutos colgado del avión, pero el jefe de salto que quedaba en el Junker 52 y el copiloto, con buen tino, se les ocurrió coger un palo de unos dos metros y medio que Llevaba el aparato (este palo servia, cuando ponían el avión en funcionamiento, para desplazar la hélice y dejarla en su correcta posición). Con este basto utensilio, él  pudo agarrarse ,  y los dos que quedaban pudieron introducirlo dentro del compartimento. Hoy esto es sólo una anécdota, pero el amigo Ángel posiblemente alguna vez soñará con aquel percance que por suerte Terminó felizmente.

El 47 Curso del Ejército del Aire Fue licenciado el 30 de agosto de 1960

 Después de pasados cincuenta años he podido reencontrarme con unos cuarenta compañeros, y todos los sin excepción, hemos coincidido en estar muy orgullosos de haber pertenecido al Primer Escuadrón de  Cazadores   Paracaidistas del Ejército del Aire, entonces a las órdenes del Teniente Coronel D. Mariano Gómez Muñoz, hoy, General de División, y en  que después de tantos años todavía nos une lo que se nos inculcó: Tesón para lograr nuestras metas, compañerismo y amistad. No quiero  terminar sin tener  un recuerdo para nuestros oficiales y compañeros que ya no están entre nosotros y que por desgracia son  bastantes , y desear a los que  quedamos que los  valores que antes he  citado  nos mantengan unidos toda la vida.

 

 

                                         Enric Pou i Quert

                                        Cazador Paracaidista del 47 EA

 

 P.D. Pido a todos los compañeros que encuentren Algún error o algo que no sea correcto, no duden en corregirme, así como si hay algún Hecho destacado del curso que hubiese Podido olvidar, os agradecería me lo recordaseis.

 

Diciembre del 2009

 

 

 

Publicado 6 diciembre, 2009 por Carlos Teixidó en Ilusión cumplida

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   Emblema Primer Escuadron de Cazadores Paracaidistas EA

           Foto actual                                 Carlos Cazador Paracaidista

            

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